7/9/15

La disciplina del silencio

Busqué hace poco el nombre de alguien muerto. No era histórico, no era tarea, no era necesario.
Era alguien que el domingo pasado por la mañana estaba y el miércoles ya no.
de qué forma sirve la ilusión o el sueño de la realidad en estos casos, donde uno es pasado irremediable, pues ya no hay mañanas que empiecen.
porque más allá de la fragilidad del estado vital, el tiempo suena y huele como si se moviera en una dirección única. y sin retrocesos. pero acaso rememorar no es un viaje en el tiempo. puede que no esté en el pasado, pero sí puedo recordarlo como si lo viviera, entonces voy allá en un estado particular.
leí hace un momento que casi todo lo que escuchamos es una opinión, no un hecho; y todo lo que vemos es una perspectiva, no la verdad.
sombras, relativismo y huellas de muerte. hay maravillosas anomalías en la conciencia, que solo empujan a una respuesta
¡el silencio!
bajo el silencio, aparece la reminiscencia que destierra los pensamientos superficiales y permite el brote de la profundidad
let's we forget
let's we stop and make silence

quisiera que hubiera sincronicidad entre tú y yo, que pudieras ver el pálpito que produces, que las huellas de tus heridas se quedaron helandome el pecho; que hay una agridulce nota de rencor y amor contigo.

y me repito, en bajo tono, casi pensando en tu oído a la altura de mis labios
let's we forget
let's we stop and make silence

y te quiero tontamente, pero te quiero con silencio