En la brújula solo hay un camino posible ante los puntos tangentes 24 y38:
Hoy domingo, un perfecto beso.
Bajo las palmas de tu mano y tu mirada enrumbada hacia el nunca infinito; ríes templando el oxígeno que nos rodea. Ignición de tu pulso y la voz de tu sonrisa; para que todos los gases nobles que no podemos ver se hinquen hacia ti.
Como mi corazón que ve lo inimitable del silencio, la paz que sobrecoge y la dicha de llamar tu nombre al viajar el aire que nos circunda.
Y puedo imaginar como sería la esperanza que no te doy hasta hoy... una morada bajo tu solaz encanto de piel nívea y rulos ensortijados de azabache.
Sé que lo sabes: podemos crear la tierra del amor, podremos si salimos a pasear un rato.
Hasta entonces... en el alto cielo, yendo al Este a las marcas de la Indochina y Laos, siendo espejos de cenotes en el Yucatán, la súbita revelación de un cometa de larga cabellera y polvo de luz, brilla para iluminar nuestro descanso y el ocaso de nuestros pensamientos.
Mira, como te puedo mirar yo
