3/1/20

Global

Pregunto por la naturaleza del entusiasmo. Cómo se hila tan denso que te empuja como resorte a las acciones concretas de tu presente. Que luego darán puerta y ventana a tu futuro. Es poco el crédito que le he dado al entusiasmo hasta hoy. 

¿En eso consiste empezar a ver más allá de lo habitual? 

Bajo qué oscura conjunción cósmica el entusiasmo se fabrica desde tu pecho e irradia al mundo. Recuerdo no hace mucho que una señora francesa me explicaba que mi voz resuene del pecho, ahí donde el corazón late es el mejor lugar para que salgan los sonidos de mi voz, aquellos que rompen silencios. 

Un hola de pecho, un amor de sonidos laringeos.

En la pasión hay entusiasmo, pero ¿todo entusiasmo necesita de pasión?  Más que retórica es una pregunta bajo la sombra de ignorancia. Pues busco el puente entre pasión y motivación. Por esa fuerza de los dorados, es que se han cometido tantas bendiciones llevando en la otra faz, maldiciones.  Desde los tiempos viejos.

Yo creo, en la sabiduría de la naturaleza. Pero algunos de sus hilos, varios pienso en realidad me asombran por su gracia en decirlo