8/4/09

No eres tú, soy yo.

Tienes un minuto para hablar. Espero que sí porque quiero hablar nuestra relación. Sí, es importante así que deja de ver tele y atiéndeme.
Perú lindo quiero que sepas que desde que te conocí supe que estábamos destinados, iba yo por la vida ojeroso, evangélico y con un par de juicios penales; pero la noche que me dijeron que estaría contigo gobernando fue el momento más hermoso de mi vida. Aún me da tanta alegría recordar el día cuando nos unimos con una banda, y mira que el rojo y blanco siempre lo odié, pero gracias a ti lo empecé a amar.
¡Qué! no me crees porque te ignoré, me fui y te choteé por fax, y luego quise meterme con una ponjita.
Cariño Perú, tú sabes que siempre supe que lo nuestro nada lo rompería por eso me atreví a tanto. Soy un hombre de decisiones rápidas y debí pensar primero en mí; tú tenías todo a tu favor, siempre habría pretendientes que quisieran contigo, a pesar de tus siglos sigues siendo apetitoso para cualquier hombre maduro. En cambio yo, ¿qué pasaría conmigo si me perseguían y daban conmigo? Seguro me encerraban por envidia y allí mis mejores años se perderían. No cariño, no podía arriesgarme a perder, y tú sabes que no soy ningún huevón. Fue una mala decisión dejarte así, tal vez de ahí ya no me la perdonas, a pesar de nuestros buenos momentos, y mira que hemos pasado épocas muy lindas y alocadas, tú y yo solos jugando a ser los más poderosos del mundo.

Como sea, no era eso de lo que quería hablarte, vivimos felices y pegados, pero de eso hace 9 años que terminamos. Ahora, dirás de qué quiero hablarte, lo que sucede es que debo ponerte en claro algo cariño Perú. No me vas a joder. Ya está, te lo dije. No pretendas que tienes derecho a pedirme explicaciones. Yo soy un hombre que no da explicaciones a nadie, estando contigo fui tu amo y señor, y si no te gusto, pues bien que te hacías. Creo que quieres mantenerme pegado a ti de mala forma. Eso es bajo. Yo te amé. No me mires así. Está bien te amé pero no tanto como me amo, pero que quieres que me desviva por ti, no pues eres muy exigente, yo también tengo necesidades. Tampoco exageres. Ya, reconozco que quizá fui algo descuidado, pero que son unas cincuenta o cien bajas. Tienes que sopesar, yo te salvé de que cayeras violado y desangrado por todos los que querían ganarse contigo. Si ahora eres un ejemplo económico y andas seguro es porque me conociste y fui tu salvador, tu papirriqui. Entonces deberías agradecerme, deberías hacer un feriado en mi nombre carajo en vez de joderme. Me afecta, siempre pensé que el ruin en nuestra relación era yo, y que te pongas a mi altura: duele. No creo que te perdone. No soporto el revanchismo. Para qué volver al pasado. Y acusándome de nimiedades encima, como si no supieras, hay que ser un macho para acabar los problemas. Yo fui un verdadero macho y por hacerte respetar ahora me dices que me propasé, además tú sabes que a nadie le importa los demás, sobre todo si son pobretones, desconocidos, vamos ni que me hubiera bajado a un Romero o un Brescia puta mare. Qué, quieres decirme algo.

Sí, ex, lamento si me quedé callado y por eso crees que tú me hiciste quien soy hoy. No ex, en verdad fueron otros hombres los que me dieron paz y me hicieron ejemplo, tú como buen oportunista te lo atribuyes; y quieres darme remordimientos, seguro ya empezaste a creer tus propias mentiras. En fin, ahora lo que importa es el futuro como dices, y por eso te abandono, pero no pongas cara de estreñido. No eres tú, soy yo. Me voy porque me he vuelto exigente con los hombres que se ligan conmigo, no es por tu impotencia, tu arrogancia, tu ignorancia y tu poca hombría que me enferman. Eso sí espero que no seas el único ex que deba rendirme cuentas. Pero no te sientas mal porque te jodo, no eres tú, soy yo; que necesita que no se hagan los pendejos conmigo, y reclamo la confianza que se auto adjudicaron de mí para abusar de siquiera una persona. Espero que aprendas esto en sombra: tú solito te uniste conmigo, asumiste una responsabilidad y tu trabajo era cumplirla sin pendejadas, nadie te debe nada, es más fuiste un abusivo. Si no entiendes, el negro tristeza te enseñará. Bye, bye, déjame ver tele y ya no me jodas.

Extraído de
Dialogos de ese "inocente" y su amado Dr. Curro Elpalmo (versión inédita)